Vecinos y el párroco de Puntallana han dado cuenta este sábado a la Guardia Civil del robo producido en el interior de la ermita del Barrio de Santa Lucia.
Al acudir al templo para la celebración de la habitual misa de cada sábado se han percatado de que todas las puertas de la ermita estaban destrozadas, sus cerraduras forzadas y en el interior habían desaparecido algunos objetos de valor.

La recaudación del lampadario y huchas para donaciones, así como algunas joyas de incalculable valor material y sentimental han desaparecido.

Se da la circunstancia de que es la tercera vez que en pocos meses este templo sufre incidentes de este tipo.