Varios países miembros del Consorcio del Telescopio de Treinta Metros (TMT) han expresado la posibilidad de retirarse del proyecto en caso de no construirse en Hawái. Entre ellos, uno de los principales inversores, Estados Unidos, que no estaría dispuesto a realizar una inversión tan potente en una instalación científica que se construyera fuera de su territorio.
La retirada de estos países imposibilitaría la financiación del proyecto, lo que puede abocar, incluso, a la cancelación de este.
La situación actual en Hawái es inviable ante las protestas indígenas que han bloqueado el acceso a Mauna Kea, provocando que las instalaciones científicas allí ubicadas lleven tres semanas sin poder operar.
Ante eso, se sigue presionando utilizando a La Palma ante las autoridades de la isla del Pacífico.
Las opciones que se abren al proyecto son la cancelación de este o la búsqueda de nuevos socios para su construcción en La Palma, garantizando la financiación de cerca de 1.400 millones de euros necesaria para la construcción del TMT.
En España, desde el director del Instituto Astronómico de Canarias hasta el ministro Pedro Duque, el portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez y el presidente del Cabildo Insular de La Palma, Mariano Hernández Zapata, han declarado su máxima disposición a acoger el telescopio.
Zapata manifestó el pasado 7 de agosto que actualmente se encontraban realizando una serie de “mejoras” en la sentencia que ya en su día fue anulada para la instalación que tenía el TMT en las cumbres de Puntagorda. En este sentido, expresó que antes de que finalizara septiembre “el TMT podría tener licencia. Estamos en coordinación tanto con el IAC como con el Ayuntamiento de Puntagorda, como con el Servicio de Medio Ambiente del Cabildo Insular de La Palma”.