La directora del Instituto Canario de Vivienda, Maribel Santana, ha confirmado en una entrevista en Onda Cero La Palma, que, si bien no se prevé que haya que asumir un alquiler, serán las personas realojadas en las viviendas provisionales quienes corran con los gastos como las facturas del agua y la luz.
En este sentido, la directora ha indicado que, en caso de que la situación lo requiriera así, se habilitarían ayudas para poder hacer frente a estos costes.
En lo que se refiere al equipamiento de las viviendas, desde la consejería de Política Social, haciendo uso de los 5 millones de euros que le ha transferido el Estado, se gestionarán ayudas para ello. Además, desde el Instituto Canario de Vivienda se invita a los ayuntamientos a implicarse en esta cuestión y que puedan habilitar también ayudas de emergencia que permitan agilizar las mudanzas.
En cuanto a los criterios que se han seguido para la baremación en la entrega de las primeras viviendas, Maribel Santana subraya que el personal de trabajo social y la comisión técnica, conformada por las administraciones implicadas en la emergencia, han marcado las condiciones, entre las que destacan: haber perdido la primera vivienda, el lugar en el que se encuentran alojadas en este momento las personas y su predisposición o no de cambiar de municipio de residencia.
Sobre esta última cuestión, Santana explica que no influye a la hora de optar a otras viviendas, pero «también hay que entender que las viviendas que estamos adquiriendo, no son todas en el Valle de Aridane, las estamos adquiriendo donde se puede». De cualquier forma, «estamos haciendo lo posible por mantener a la gente en su municipio de origen» apunta la directora del Instituto Canario de Vivienda, a la vez que subraya que también «hay algunas familias que, tras los sucedido con el volcán, no quieren permanecer aquí y tenemos que respetarlo».
