La recaudación acumulada del IGIC durante el primer semestre del año se situó en los 931 millones de euros, de acuerdo con los datos de la Agencia Tributaria Canaria. Esta cantidad supone un 11,7 por ciento de incremento sobre 2019 -el último ejercicio desarrollado bajo circunstancias económicas normales- y una importante moderación frente a los datos del primer trimestre de 2022, cuando aumentó un 19%, también en relación con idéntico período de 2919.
El vicepresidente canario y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, ya venía anticipando la ralentización del ritmo de recaudación del IGIC, el impuesto más importante del Bloque de Financiación Canario (BFC) y, en paralelo, el incremento del gasto público al que deben hacer frente administraciones como la canaria, además, con la consideración de que el 58% de la recaudación por ese concepto se destina a cabildos y ayuntamientos, frente al 42% que se queda en las arcas autonómicas.
En relación con este último aspecto, Rodríguez ha insistido en que las obligaciones del Ejecutivo se han multiplicado en los últimos años con motivo de la pandemia -que obligó al refuerzo de los servicios públicos esenciales y al libramiento de fondos extraordinarios para ayudar a los sectores productivos- y, ahora, con la escalada de precios.
“Esto significa -explicó el vicepresidente- que necesitaremos todos los recursos disponibles para mantener la intensidad de los servicios que prestamos a los ciudadanos y también para activar ayudas a los sectores de la sociedad y la economía más expuestos a la inflación”.
En este sentido, mientras la recaudación del IGIC ha crecido un 11,7 por ciento en el primer semestre de este año con respecto a 2019, el Gobierno de Canarias ha consolidado un gasto público que ha crecido en más del doble en el mismo período, de acuerdo con los cálculos de Hacienda. A la hora de evaluar el crecimiento recaudatorio, también ha de tenerse en cuenta, respecto a los datos